Ni los antidepresivos acortan la vida ni el activismo social previene la enfermedad mental. Psiquiatras alertan del peligro de hacer caso a los bulos que difunde el Ministerio
La Razón: Madrid 18.06.2024 – Marta de Andrés
Desde que el Ministerio de Sanidad presentó el borrador de su Estrategia de Salud Mental, a finales de 2021, las sociedades de psiquiatría llevan alertado de los errores de concepto con el que se plantean las políticas para abordar uno de los problemas de salud más importantes de la sociedad española. Desde las primeras versiones, el documento ya atacaba frontalmente a la psiquiatría como ciencia, y le echaba la culpa de que España sea uno de los países del mundo donde más psicofármacos se consumen.
Pero no solo el Ministerio nunca escuchó a los profesionales de este ámbito, sino que su enconamiento se ha ido radicalizando con el paso del tiempo. Durante la Comisión Mixta para el estudio de los Problemas de las Adicciones en el Congreso, que tuvo lugar el pasado mes de abril, la ministra, Mónica García, dijo que el consumo de hipnosedantes, como las benzodiacepinas, produce 1.000 muertes al año de forma directa y otras 2.000 relacionadas. Al poco tiempo, el Comisionado de Salud Mental anunció que preparaba una guía para reducir los fármacos psicotrópicos, y lanzó mensajes más que discutibles como que «los tratamientos farmacológicos a largo plazo matan. Estas personas viven 20 años menos».
Ante tales sin sentidos, Celso Arango, uno de los psiquiatras más reconocidos en Europa y en el mundo, director del Instituto de Psiquiatría y Salud Mental del Hospital Gregorio Marañón, jefe del departamento pediátrico y juvenil del mismo centro hospitalario y miembro de miembro de la Academia Nacional de Medicina de Estados Unidos, contestó a las declaraciones en un hilo de la red social X.
En él, hacía referencia a un estudio de incidencia de primeros episodios de psicosis a nivel mundial, recién publicado en la revista científica The Lancet Psychiatry, del que es coautor, y señalaba lo siguiente: «Mientras algunos se preocupan de que las personas con trastorno mental tomen tratamientos el mundo se preocupa porque el principal problema de la salud mental sea que la mayoría de las personas no tengan acceso a esos tratamientos. ¿Se imaginan a una ministra de Sanidad compartiendo que los fármacos que tiene aprobados su Ministerio matan y si no se toman se vive más, en contra de toda evidencia científica? Y digo en contra porque es exactamente al revés», indica.